Me gusta escribirte,
y me aliento a creer ,
que alguna vez...
tu también me escribes .
Que extrañas las charlas que nunca tuvimos,
y que mi recuerdo puebla tus noches,
así como el tuyo habita en las mías, en mi memoria y en mis paredes.
Me gusta sentir
que eres el poseedor de mis secretos.
El amante de mis silencios.
El cómplice de las verdades que
encubro.
El refugio, en el que siempre me
encuentro.
Que soy lluvia en tu rostro ,
besando tus parpados,
lamiendo tus labios,
descansando en tu pecho.
Desespero:
En este estar sin pausa ni esperanza,
donde las palabras, me empujan a tu
nombre
y a tu ausencia.
Donde me empapo en el mutismo de tus
ojos ,
y descanso sobre el papel rancio de tu
carta.
Me pesa la piel, me arden las yemas,
y me libero de mis manos en una cadente
danza de fuego.
Eres la jaula y el alimento,
el temblor y la fuente.
El musgo y la rompiente.
Me gusta soñar...
que me escribes y me lees .
Pero conozco mi lugar...
y en el permanezco.
Como un animal totémico,
al otro lado del espejo.
Me gusta soñar ..
que es a Mi , a quien le escribes,
por eso ,eres el dueño de la poesía
.
